¡La Verdad está en Dios y viene de Dios! ¡Es una luz que viene de las esferas luminosas, de la voluntad de Dios!
La Luz de la Verdad es el fundamento de todas las Leyes de la Creación, determinando el ritmo de vida de todo lo que existe. ¡La verdad es la Luz más pura! Esta luz límpida refleja la justicia y el amor manifestados en las leyes infalibles del destino y del universo.
¡La verdad es la Luz viviente de la Voluntad de Dios! Brilla para los espíritus humanos que luchan por un conocimiento superior y que buscan conocer el propósito de su existencia. Es la Luz que empuja hacia arriba, alentando a los espíritus humanos vivos a buscar las conexiones ocultas de todos los eventos... ¡
El verdadero buscador de la Verdad aspira al conocimiento! Conocimiento de las maravillosas Leyes del Universo, constructivas y conservadoras, con las cuales el destino de uno está estrechamente vinculado.
¡Iluminación por la luz de la verdad! Reconocimiento y conocimiento! ¡Paz y armonía! Las fuerzas positivas fluyen hacia el espíritu humano...
La Luz, que revela la Verdad de todo lo que se creó, es un flujo fundamental que una vez iluminó tan brillantemente el mundo de la materia densa de los seres humanos, una era olvidada durante mucho tiempo...
En ese momento, ni una sola persona ignoró la Ley de la Creación declarando que:
"Lo que el hombre siembra, debe cosechar".
Los seres humanos estaban tan estrechamente relacionados con la naturaleza que informaron los efectos de los fenómenos naturales en sus propias vidas. Inconscientemente e intuitivamente, reconocieron muchos eventos relacionados con sus vidas terrenales.
En el pasado, el nacimiento y la muerte aún no eran fenómenos enigmáticos. Todos sabían individualmente que solo el cuerpo carnal moría y que el cuerpo de materia sutil que lo había habitado, continuaba viviendo en un mundo de materia menos densa, hasta que regresara a la Tierra...
La Luz del Mundo
La verdad brillaba en las esferas supremas, al igual que en la materia densa. No se trataba de una búsqueda de la Verdad. La palabra "verdad" por cierto era desconocida. Los seres humanos recibían con regularidad, exactamente de acuerdo con su grado de desarrollo, la educación superior que recibían con confianza. La Luz de la Verdad nunca ha sido escondida de ellos. Y durante mucho tiempo iluminó el camino de sus vidas.
Esta Luz también perforó las palabras humanas como un fluido mágico. Las palabras humanas fueron una vez más "mensajeros" que difundieron la pureza y la fuerza, y también lo hicieron los mensajes que transmitieron.
¡La Luz de la Verdad es el flujo fundamental de todas las Leyes de la Creación! Las leyes de la creación o las leyes de la naturaleza son las mismas.
Reconocer la Verdad significa reconocer las conexiones de los fenómenos de la Creación y sigue siendo el único milagro que puede salvar a muchas criaturas humanas... Poder salvar... Conocer la Verdad sobre todas las cosas es decisivo hoy para el destino humano.
¡La verdad es una luz en la creación! Una luz que nunca debe ser molestada! Cuando nació la mentira, esta Luz fue "velada" y eso por el "brillo engañoso" de la mentira que se extendió entre los seres humanos. Un "mundo ficticio" es lo que el ser humano creó para sí mismo, deslumbrado por su propia grandeza. Y este mundo se hizo denso, casi impenetrable.
¡La mentira es hostil a todo lo que es brillante! Desgracias, sufrimientos y horrores que fluyen hacia los seres humanos... los demonios y la furia oprimen a las criaturas que viven en el engañoso brillo de las mentiras...
¡Las palabras humanas se convirtieron en mensajeros de mentiras! Difunden la decadencia humana y el caos. Influyen, hostiles y destructivos sobre la existencia humana. Cada promesa traidora y cada palabra que se pierde conducen a los demonios de la descomposición...
Mentir es una corriente de veneno que ahora está invadiendo. Todas las concentraciones de pensamientos están impregnadas de estos gérmenes. Nada se conserva.
La mentira, la gran mentira de la humanidad es el arma de los espíritus negados, los luciferinos. Las consecuencias son: falsa creencia, idolatría, desgracia y muerte espiritual...
¡La luz límpida de la verdad conduce al reconocimiento de la voluntad de Dios en la creación, el verdadero conocimiento y el poder espiritual! Fuerza, fidelidad, felicidad y paz fluida de esta Luz hacia los seres humanos en la Tierra como en el Cielo...
Ver y reconocer la Luz de la Verdad es muy difícil hoy para los seres humanos atrapados por sus errores. La mentira ha prevalecido en la Tierra desde hace mucho tiempo. La verdad asusta a estas criaturas humanas relacionadas con la materia y esto es muy comprensible. Dado que la verdad se concibe como algo nebuloso, misterioso... algo que no tiene una definición correcta y que puede parecer incluso fatal. Pocas personas entre los seres humanos todavía son capaces de sentir intuitivamente que la Verdad es la única Luz capaz de sacarlos de la oscuridad...
Hoy en día, muchos seres humanos buscan la Verdad. Es innegable que los fundamentos de la existencia humana ya están oscilando y que se debe encontrar una solución. Empujando como hongos, surgen falsos profetas que seducen a muchos buscadores de la Verdad, manteniéndolos prisioneros en sus laberintos de errores...
¡El buscador sincero de la Verdad, inevitablemente se encontrará también con la "Cruz de la Verdad"!
Rodeada por un círculo, esta cruz consta de dos ramas iguales, que simbolizan las dos corrientes fundamentales. La rama vertical representa el principio positivo, masculino, y la rama horizontal, el principio negativo, femenino. En su actividad estas dos ramas forman un todo en el Círculo de la Creación. En estas corrientes fundamentales vibran los principios masculino y femenino que incitan a la vida en el movimiento circular eterno de la Creación, el desarrollo y la madurez a la perfección...
La cruz de la verdad! La Cruz Isósceles también puede llamarse la "Cruz de la Vida" porque simboliza la acción de la fuerza viviente en la Creación de la cual aparecieron todas las formas de vida: humana, animal, vegetal y, por supuesto, entéalica. Todas las manifestaciones de la vida provienen de la cruz, de sus dos corrientes fundamentales: la positiva y la negativa.
A lo largo de este libro, encontramos constantemente las palabras: Creación, construcción de la Creación, fenómenos de la Creación... Con estas expresiones, en nuestra corta comprensión, nos limitamos a entender acontecimientos de la Tierra o los sistemas solares de materia densa... Aquí se trata y será siempre sobre el "desarrollo de la Creación" en su totalidad, que ha conocido su origen en tiempos y alturas más allá de nuestro entendimiento. La Tierra y toda la materia densa, con sus miles de millones de sistemas solares, son solo las últimas ramificaciones...
Para terminar:
Busque la "Luz de la Verdad". ¡Busque la "Cruz de la Verdad"! ... Con la Verdad en el corazón, todos pueden dirigir su destino y no tendrán que temer ningún obstáculo en el camino.
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